El poder del compromiso

“Mientras no estemos comprometidos, surgen dudas y existe la posibilidad de volver atrás, y siempre hay ineficacia.
En relación con todos los actos llenos de ineficacia hay una verdad elemental, cuya ignorancia mata innumerables planes e ideas espléndidas. En el momento que asumimos un compromiso de manera definitiva, la providencia divina también se pone en movimiento. Todo tipo de cosas ocurren para ayudarnos, que en otras circunstancias jamás habrían ocurrido. Todo un fluir de acontecimientos, situaciones y decisiones crean a nuestro favor todo tipo de incidentes, encuentros y ayudas materiales que nunca hubiéramos soñado encontrar en nuestro camino. Cualquier cosa que puedas hacer o soñar, puedes empezarla.
El valor encierra en sí mismo genio, fuerza y magia”. Goethe

No hay cambio, ni mejora, ni transformación si no estás dispuesta a hacer lo que hay que hacer.
No hay cambio, ni mejora, ni transformación si no estás comprometida contigo misma.
No hay cambio, ni mejora, ni transformación si no tienes el poder del compromiso.

Esto no es solo retórica para quedar bien y soltarte un rollo más o menos interesante.

Esto, es lo que veo continuamente en mis talleres y en las sesiones de coaching. Las personas que realmente están comprometidas con su transformación, las mujeres que aunque suene duro decirlo así, están comprometidas con su mejora y su felicidad, aquellas, que saben que no es fácil pero aún así, van a seguir adelante para conseguirlo:

LO CONSIGUEN

Avanzan, descubren, se descubren, comienza el cambio en ellas y todo lo demás empieza a moverse como por arte de magia. Pero no es magia, es el compromiso con ellas mismas lo que les lleva a ponerse en acción. Lo que les da la llave para abrir las puertas de su felicidad, para derrumbar muros y construir nuevos caminos.

No hay excusas cuando hay auténtico compromiso.

Aprendes a conocer cómo te boicoteas, las cosas que te dices para que todo siga igual, la recurrente falta de tiempo, las cosas en que ocuparte….todo lo que te digas, pienses y sientas para seguir donde estás. Así es, duele, pero así es.

Tenemos tanta responsabilidad en nuestra felicidad, en nuestro crecimiento, en nuestras relaciones…… que solo tenemos que darnos cuenta de ello para adquirir el compromiso de cambio y mejora y ponernos en acción.

Dejarás de culpar a los demás, al mundo, a la sociedad….. aprenderás a reconocer las trampas del “siempre se ha hecho así”, “del que dirán los demás”, del “y si no me sale bien”….y entonces, un mundo nuevo de casi infinitas posibilidades aparecerá ante ti.

Esto es el coaching, esto es el crecimiento personal. Luego podremos trabajar en mejorar nuestra autoestima, en gestionar nuestros miedos, en elaborar un plan de acción….podemos trabajar juntas en todo lo que quieras. Pero lo fundamental es Tu compromiso y lo que estés dispuesta a hacer por Ti.